Acta de comisión 03 del 14 de agosto de 2007 cámara - 7 de Septiembre de 2007 - Gaceta del Congreso - Legislación - VLEX 451330826

Acta de comisión 03 del 14 de agosto de 2007 cámara

ACTA DE COMISIÓN 03 DEL 14 DE AGOSTO DE 2007 CÁMARA. COMISION PRIMERA CONSTITUCIONAL PERMANENTE

ACTA NUMERO 03 DE 2007

(agosto 14)

Legislatura 2007- 2008

(Primer Periodo)

En Bogotá, D. C., el martes 14 de agosto de 2007, siendo las 10:50 de la mañana, se reunieron los miembros de la Comisión Primera Constitucional Permanente de la Cámara de Representantes, en el recinto de sesiones de la misma, previa citación, con el fin de dar inicio formal a la sesión. Presidida la sesión por el honorable Representante Jorge Humberto Mantilla Serrano.

El señor Secretario de la Comisión Primera Constitucional Permanente, doctor Emiliano Rivera Bravo, procede con el llamado a lista y verificación del quórum (como primer punto del Orden del Día).

Contestaron los siguientes honorables Representantes: Ceballos Arévalo Sandra

Giraldo Jorge Homero

Gómez Román Edgar Alfonso

Legro Segura River Franklin

Mantilla Serrano Jorge Humberto

Morón Cuello Alvaro

Mota y Morad Karime

Navas Talero Carlos Germán

Piedrahíta Cárdenas Carlos Arturo

Silva Amín Zamir Eduardo

Tapasco Triviño Dixon Ferney

En el transcurso de la sesión, se hicieron presentes los siguientes honorables Representantes:

Aldana Vivas Ismael de Jesús

Arboleda Palacio Oscar

Avila Durán Carlos Enrique

Barreras Montealegre Roy Leonardo

Carvajal Ceballos José Tayron

Córdoba Suárez Juan de Jesús

Durán Barrera Jaime Enrique

Guerra de La Rosa Orlando Aníbal

Luna Sánchez David

Martínez Rosales Rosmery

Motoa Solarte Carlos Fernando

Olano Becerra Germán Alonso

Pacheco Camargo Tarquino

Paredes Aguirre Myriam Alicia

Pereira Caballero Pedrito Tomás

Pinillos Abozaglo Clara Isabel

Puentes Díaz Gustavo Hernán

Rivera Flórez Guillermo Abel

Sanabria Astudillo Heriberto

Soto Jaramillo Carlos Enrique

Uribe Rueda Nicolás

Varón Cotrino Germán

Vélez Mesa William

Con excusa el honorable Representante:

Rangel Sosa Miguel Angel.

Señor Presidente, se ha conformado quórum deliberatorio.

Presidente, honorable Representante Sandra Ceballos Arévalo:

Señor Secretario, sírvase leer el orden del día.

Secretario:

Sí, señora Presidenta.

ORDEN DEL DIA

I

Llamada a lista y verificación del quórum.

II

Invitación y citación a funcionarios

INVITADOS:

Padre Darío Alvarez Botero, Presidente Tribunal Eclesiástico de Bogotá.

Padre Félix Piñeros.

Tema: Fallo proferido por el Tribunal Eclesiástico de Bogotá, en el caso del Sacerdote Rozo, acusado contra la libertad, integridad y formación sexual, cometidos contra menores.

Proposición presentada por los honorables Representantes Carlos Arturo Piedrahíta, Tarquino Pacheco, Germán Olano, David Luna, Roy Barreras, Karime Mota, Dixon Tapasco y Guillermo Rivera.

III

Lo que propongan los honorables Congresistas

El Presidente,

Jorge Humberto Mantilla Serrano.

La Vicepresidente,

Sandra Ceballos Arévalo.

El Secretario,

Emiliano Rivera Bravo.

La Subsecretaria,

Amparo Yaneth Calderón Perdomo.

Señor Presidente, igualmente la secretaría le informa que ayer llegó la siguiente comunicación con relación a esta citación.

Tribunal Eclesiástico, Interdiocesano de Bogotá, Bogotá 7 de agosto de 2007, honorables Representantes.

Acuso recibo de su amable carta con fecha 2 de agosto del presente año, donde me invitan a presentar, ante la comisión, los alcances de la presunción de inocencia que este tribunal eclesiástico dio a conocer a la opinión pública y que ha suscitado el interés de esa Cámara Legislativa.

La iglesia católica ha ayudado a forjar la nacionalidad colombiana y el tejido social de nuestra Patria, a través de una cercana colaboración con los hombres y las instituciones que buscan el progreso y el bien común; es así que rechaza cualquier agresión contra el ser humano y contra los menores de edad y apoya al Estado Colombiano en las iniciativas de justicia que se propongan.

Sobre estas premisas y para manifestar la buena voluntad de la iglesia en la búsqueda de un orden social más justo y equitativo y sabiendo que me dirijo a conocedores de los derechos fundamentales de las personas, me permito decir lo siguiente:

  1. El Tribunal Eclesiástico de Bogotá, órgano competente para conocer las demandas de nulidad de los matrimonios canónicos y para imponer penas y sanciones por delitos cometidos según la Ley Canónica, anunció a la opinión pública el inicio de una investigación para conocer la conducta del Padre Efraín Rozo Rincón, de setenta y nueve años, quien afirmó ante un canal de la televisión colombiana, en un incorrecto e incomprensible inglés con subtítulos en español, que proporcionó el mismo canal, que había cometido abuso sexual contra menores de edad, cuando estaba en los Estados Unidos hacia el año 1966.

  2. La manera ilegal como lo sometieron a hablar en lengua extranjera lo llevó a buscar una retractación ante otro medio de televisión y a formular posteriormente demanda penal contra su sobrino, la supuesta víctima del abuso sexual, su hermano, los camarógrafos y los abogados americanos que, sin permiso de trabajo, lo obligaron a hablar en su contra, según consta en el Protocolo 17.281 de la Fiscalía General de la Nación.

  3. La investigación se hizo conforme a las normas del derecho canónico por la que se rige la Iglesia Católica.

  4. El Padre Rozo suministró la dirección en los Estados Unidos de su sobrino, quien fue contactado por el Tribunal para que demandara formalmente por los supuestos abusos a los que fue sometido. Ernesto Rozo, supuesta víctima, no quiso comparecer, ni enviar información alguna, ni acusar, ni mucho menos demandar para que la justicia canónica hiciera su cometido. Lo mismo sucedió con la otra supuesta víctima que parece vive en Ecuador.

  5. Mientras tanto, el tribunal llamó a declarar al Padre Rozo, quien presentó todos sus descargos a través de su abogado, quien actuó también como parte ante la Fiscalía.

  6. Se esperó el tiempo que el juez consideró oportuno, casi nueve meses en espera de tener demanda, acusación formal ante la iglesia, a través del tribunal competente y para ello se invitó a que se formularan los cargos correspondientes. Nunca se presentó demanda alguna ni acusación formal contra el Padre Rozo, por parte de su sobrino o de las otras supuestas víctimas.

  7. Al no haber acusación, el juez, respetando los derechos que tiene todo bautizado ante la iglesia católica, reconoció la presunción de inocencia, única respuesta posible ante la ausencia de demanda. Esta presunción no es un fallo absolutorio, porque no hubo proceso ni sentencia, como maliciosamente lo han afirmado varios medios de comunicación social que carecen de conocimiento y de la más mínima ciencia jurídica.

    Sólo ante la demanda y acusación formal y teniendo en cuenta la norma del canónico 1526, la carga de la prueba incumbe a quien afirma; se podrá proceder según las normas del derecho canónico a castigar o absolver a quien ha sido señalado como culpable de un delito; tampoco ante la Fiscalía General de la Nación, las supuestas víctimas han acudido a denunciar penalmente al agresor.

  8. En el evento en que se presentara una demanda formal contra el Padre Rozo o contra un miembro de la Iglesia Católica, el tribunal procederá al juicio y definición del supuesto delito, sin perjuicio de las acciones que compete a la Fiscalía General de la Nación.

    Debido a los múltiples compromisos que tengo como Presidente del Tribunal, en audiencias y declaraciones que fueron concedidas con anticipación a personas que viven fuera de Bogotá y hacen parte de mi jurisdicción; me excuso de aceptar la honrosa invitación que me hicieron para el 14 de agosto del presente año, a presentar estas conclusiones ante la comisión.

    De ustedes, atentamente Padre Darío Alvarez Botero, Presidente del Tribunal Eclesiástico de Bogotá.

    Esa ha sido la nota, señor Presidente, que en la secretaría de la Comisión Primera, por parte del Tribunal Eclesiástico de Bogotá, ha sido radicada.

    La presidencia concede el uso de la palabra al honorable Representante Carlos Arturo Piedrahíta Cárdenas:

    Gracias, señor Presidente. Yo lamento sinceramente que el señor Presidente del Tribunal Eclesiástico no se haga presente, ante la invitación que se le hizo con las formalidades propias que exige la Ley 5ª de 1992.

    Esta conducta parece que es constante en la iglesia católica, apostólica y romana, porque en noviembre del año pasado, cuando se dieron a conocer los hechos delictuosos, presuntamente cometidos por el Padre Rozo, invitamos al Cardenal Pedro Rubiano, el máximo jerarca de la iglesia católica, formador de juventudes ¿como él mismo se autodenomina¿, para que se hiciera presente en este recinto con el fin de dar las explicaciones pertinentes y aclararle a todo Colombia cuáles eran las acciones que estaba tomando la iglesia católica colombiana con relación a la conducta de los sacerdotes pederastas o pedófilos que todos los días se denunciaban. Fue también esa la misma explicación que dio, para no venir acá al recinto de la Cámara de Representantes.

    Con base en eso, nosotros, un grupo de parlamentarios, nos dimos a la tarea de invitar al Padre Darío Alvarez Botero, para que se pronunciara sobre cuál es el alcance del fallo que ha dado el tribunal, que entre otras cosas dice que no se puede adelantar la investigación porque ha transcurrido el tiempo y que por la prescripción, la acción no puede iniciarse, reclamadas ante la opinión pública, ante todo Colombia, que el derecho canónico trae una figura como la traen todos los derechos en todo el mundo y es la renuncia a la prescripción.

    Es decir, que el Padre Rozo, si él dice que no es culpable, que no ha cometido ningún ilícito, que son falsas las imputaciones que se le hacen sobre abusos sexuales cometidos contra un número centenar de niños, entonces que dé la cara a toda Colombia, a todo el mundo, y diga que eso no es cierto; entonces que para eso debía renunciar a la prescripción y que el Tribunal Eclesiástico en su sabiduría inmediatamente procediera a hacer la investigación pertinente.

    Desde aquí le estamos reclamando al Padre Rozo que, en un...

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